Después de 48 órbitas y 71 horas, volver a la Tierra fue ya una hazaña de por sí, pero si además resulta que pasó más tiempo en el espacio que todos los astronautas estadounidenses sumados hasta esa fecha, es para quitarse el sombrero. Pertenecer a una familia campesina le da más mérito aún, por toda la dificultad que debía suponer acceder a estudios superiores en aquella época para personas de esa extracción social, lamentablemente. Que empezara a trabajar en una fábrica textil cuando tenía 18 años, y a los 22 años hiciese su primer salto en paracaídas habla acerca de un personaje muy especial, con una entereza y unas capacidades fuera de lo común.
Es triste que prácticamente la obligaran a casarse con el otro astronauta porque le fuera conveniente a su gobierno como propaganda. Es normal pues que la pareja, tras unos viajes programados al extranjero se separara, a pesar de haber tenido una hija. Que Valentina alcanzara un cargo en el Soviet Supremo es ya el culmen de su carrera.
Y recibir la Medalla de Oro de la Paz de las Naciones Unidas el mejor broche final.
Me ha encantado.
Te invito a visitar mi blog y comentar el artículo que desees.
Muchas gracias

Responder