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Tras la última frontera

Nicolás de Ribera

  1. Breve biografía de Nicolás de Ribera
  2. Viajes de Nicolás de Ribera
  3. Descubrimientos de Nicolás de Ribera
  4. La casa de Nicolás de Ribera

Breve biografía de Nicolás de Ribera

Nicolás de Ribera fue el primer alcalde de Lima y uno de los primeros benefactores de los indios que hubo en Perú. Se le conocía como “El Viejo” por su participación desde el inicio de la conquista y como El olvereño por haber nacido en la villa de Olvera una ciudad española.

De Ribera se instaló en Panamá en 1522, donde se unió a Francisco Pizarro, Hernando de Luque y Diego de Almagro. Esto ocurrió en el justo momento cuando planeaban el la exploración de las misteriosas tierras del Perú y colaboró en la construcción de una pequeña carabela que fue llamada Santiaguillo.

Francisco Pizarro, Nicolás de Ribera y sus hombres junto a Manco Inca
Francisco Pizarro junto a Manco Inca

Fue uno de los Trece de la Fama, participó en los viajes para el descubrimiento del Perú y además fue encomendero en Ica. Se casó en Lima en 1539 con Elvira Dávalos y Solier con la cual tuvo nueve hijos, falleciendo en Lima en 1563.

Viajes de Nicolás de Ribera

Nicolás de Ribera en 1524 salió a explorar las costas del Mar del Sur junto con Diego Almagro y Francisco Pizarro. Se desempeñaba como tesorero, cargo que desempeñó en las dos primeras expediciones, en este viaje en un enfrentamiento fue herido y casi pierde la vida.

Al finalizar el primer viaje en mayo de 1525 es enviado de regreso a Panamá junto con Almagro a reparar el navío, conseguir bastimentos y reclutar gente. Además fue encargado de resguardar, controlar e informar de las riquezas conseguidas en la expedición.

Al llegar a Panamá Nicolás de Ribera, tendría que rendir cuentas al gobernador en persona del oro fino encontrado, representado éste por las piezas labradas y joyas conseguidas durante el recorrido del primer viaje.

Para agosto de 1526, inició el segundo viaje, donde exploraron la bahía de San Mateo, el pueblo de Atacames, el río San Juan, la boca del río Santiago hasta la Isla del Gallo, lugar adonde llegaron en junio de 1527.

En este viaje consiguieron tierras ricas en oro, donde encontraron y extrajeron oro bajo y consiguieron algunos bastimentos. Cuando llegaron a la Isla del Gallo De Ribera junto con otros 13 expedicionarios, deciden quedarse con Pizarro.

Nicolás de Ribera y los trece de la fama

Esta es la razón por la que se dice que fue parte del grupo llamado los Trece de la Fama. De allí, pasaron a Gorgona donde fueron recogidos por la carabela de Bartolomé Ruiz, desde allí continuaron hacia el Sur para regresar a Panamá.

Nicolás de Ribera, Pizarro y el resto de hombres de los trece de la fama en la isla del Gallo.
Nicolás de Ribera, Pizarro y el resto de hombres de los trece de la fama en la isla del Gallo.

Cuando llegan a Panamá, Francisco Pizarro viaja a España y Nicolás de Ribera se queda. Allí es honrado con el título de caballero de la Espuela Dorada en la Capitulación de Toledo, además, lo nombran regidor de la entonces nonata ciudad de Tumbes.

Almagro encontrándose en España le pide a Ribera (Quien tenía fama de hombre honrado e íntegro), que se trasladará a Nombre de Dios. Para que reclutara marinos, soldados y aparejos para sus embarcaciones.

Descubrimientos de Nicolás de Ribera

Nicolás de Ribera para ir a Nombre de Dios cruzó el río Chagres hasta un lugar llamado Las Cruces. Esto lo llevó a descubrir la forma de facilitar la comunicación entre Panamá y el océano Atlántico, estableciendo así una ruta. La cual muy pronto comenzó a ser utilizada por todos los viajeros a través del Istmo.

Cuando cumplió con el encargo volvió a partir a conseguir indios aliados y a reclutar soldados, pero esta vez a Nicaragua. Al regresar a Panamá llegó Pizarro de España y se volvieron a caldear los ánimos entre Pizarro y Almagro que se sentía defraudado.

Tercer viaje

Los planes trazados con Perú estaban a punto de perderse, pero intervienen el licenciado Gaspar de Espinosa, el clérigo Hernando de Luque y Nicolás de Ribera. Todo para buscar un acuerdo amigable, y fue así como se pudo efectuar el tercer viaje al Perú.

Nicolás de Ribera puso todo su esfuerzo y empeño para mantener unidos a Pizarro y Almagro que estaban poseídos por una gran desconfianza. Éste se embarcó en el tercer viaje, pero bajó las órdenes de Pizarro y volvió a Panamá con Almagro a reclutar más hombres, pero ahora en Veragua.

Esta es la razón por la que no se encontraba en la fundación de San Miguel de Piura, tampoco estaba en Cajamarca cuando capturaron al Inca Atahualpa. De Ribera llegó entre marzo y abril de 1533 con la tropa de Almagro e inmediatamente se puso bajo las órdenes de Pizarro.

Para entonces, Pizarro lo deja al mando de la guarnición de Jauja, en la región central actual de Perú. Después lo envió a reconocer la costa para impedir las pretensiones de Pedro de Alvarado, en este tiempo De Ribera bajó hasta los llanos y en el valle de Pachacamac fundó un pueblo.

Nicolás de Ribera regresa a Jauja con una gran tropa, en Pisco funda la ciudad de Sangallán y es nombrado teniente de gobernador. Para entonces, estando Almagro y Pizarro en Pachacamac, llega la expedición de Pedro de Alvarado con ánimo combativo.

Almagro y Pizarro enviaron un mensajero a Nicolás de Ribera para que se les uniera lo más pronto posible. Entonces llegan a un acuerdo con Alvarado y todo vuelve a la calma, Pizarro decidió despoblar Sangallán.

Nombrado Alcalde de Ciudad de los Reyes

Comenzó a explorar hasta conseguir el lugar donde el 18 de enero de 1535 se fundaría la Ciudad de los Reyes, también llamada Lima. El primer alcalde de la que sería el virreinato del Perú, la capital de la Nueva Castilla y de la actual República del Perú fue Nicolás de Ribera.

Retrato de Nicolás de Ribera
Retrato de Nicolás de Ribera

Éste no sólo fue el primer alcalde, sino fue quien trazó el lugar de la Plaza Mayor y los Solares con la ayuda de Diego de Agüero. Para darle forma de un gran tablero de ajedrez, lo cual lo llevó a recibir muchos méritos y reconocimiento.

El cargo de alcalde lo ejerció en cuatro oportunidades, este era un cargo que tenía una duración de un año. De Ribera ocupó el cargo en los años 1544, 1546, 1549 y 1554.

Aporte a la ciudad

De Ribera junto a Diego de Agüero y con las instrucciones topográficas de Juan Tello fue uno de los trazadores de la nueva urbe. Ellos fueron quien diseñaron Los Reyes en forma de un damero o una cuadrícula similar a los campamentos romanos.

Por la preexistencia de canales prehispánicos, adoratorios y caminos era complicado adaptar las 117 manzanas. Así fue como decidieron arrimar la plaza no al centro del damero sino cerca del río y solo pudieron encuadrar 62 manzanas.

Al parecer y por un documento citado por José A. del Busto De Ribera, fue determinante para decidir el primer nombre de la ciudad. Donde explica que la ciudad de los Reyes lleva ese nombre porque fue erigida el 6 de enero, cuando es la festividad de Reyes.

Nicolás de Ribera aportó mucho a la ciudad porque durante casi treinta años fue su vecino o autoridad hasta su muerte. Durante este tiempo, tuvo que mediar en los pleitos entre almagristas y pizarristas, enfrentando las amenazas de las huestes de Manco Inca.

Nicolás y el primer Virrey

Fue encargado de recibir al primer virrey que fue Blasco Núñez de Vela, pero De Ribera no aceptó su autoridad. También se opuso a la abolición de las encomiendas, debido a que en Pisco había recibido una repartición de indios.

El aspecto que debió tener Lima en los tiempos de Nicolás tuvo que ser hosco. Esto por las cabezas decapitadas de los caudillos rebeldes en la Plaza de Armas, también porque la ciudad todavía era rural

La ciudad para ese tiempo tenía senderos arbolados que llevan directo al damero, con casas bajas de adobe, ruidosas acequias, jardines y huertas floridas. Por donde asomaban las bóvedas de los templos, con sus sencillos campanarios.

Para la atención de los indios de su encomienda, fundó el 13 de mayo de 1556, el Hospital de Naturales de Ica. A estos les dejó una parte de sus bienes.

La casa de Nicolás de Ribera

El solar que le correspondió a De Ribera se encontraba a un lado de la plazuela de Santo Domingo. El frente de su casona daba a la calle de la Veracruz frente al convento de los frailes dominicos, que en la actualidad es la segunda cuadra del jirón Conde de Superunda.

En esa casona vivieron sus descendientes, los cuales se encargaron de tallar los balcones de cajón y labrar la portada de piedra. Estos aunque muy renovados pero conservando su esencia todavía existen.

Este hombre destinó parte de sus ingresos a diferentes actividades económicas, adquirió en Lima varias fincas. Las cuales después de hacer mejoras arrendaba para con ello tener una renta complementaria a la de su encomienda del Valle de Ica.

En 1543 compró en almoneda dos solares cercanos a los de los frailes de Santo Domingo. En 1546 se asoció con el contador Juan de Cáceres para comprar unas casas ubicadas al lado de las de su hermano Alonso Martín de Don Benito, además de una chacra.

Al morir, De Ribera es sepultado en la primera Catedral, que era una capilla que adquirieron él y su esposa. Cuando se construyó la nueva catedral, sus restos fueron llevados a la Capilla de Santa Ana y colocados en la nave de la Epístola.