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Tras la última frontera.

LOS ANIMALES Y EL MATERIAL DE CAMPAMENTO POLAR

LA LOGÍSTICA DE UNA EXPEDICIÓN POLAR III

En este artículo te vamos a explicar las diferencias entre la expedición de Scott y Amundsen en lo que respecta a los animales y el material de campamento polar. Quizás un poco más de diligencia en la elección de estos habría salvado la vida a Scott y sus compañeros…

  1. Animales de las expediciones Polares
  2. Material de Campamento
  3. Un refugio estandarizado
  4. La cabaña antártica Noruega
  5. Aislamiento y distribución del refugio antartico
  6. Tiendas de campaña

Animales de las expediciones Polares

Como hemos visto, la expedición británica confió más en la utilización de ponis que en la utilización de perros como fuerza principal de arrastre. En este punto, existe también una gran diferencia entre expediciones, los británicos se decantaron por el uso del arnés de Groenlandia. Por el contrario, los noruegos dedicaron tiempo a estudiar, que tipo de arnés sería el más conveniente y eficiente para su uso en la Antártida, llegando a crear un prototipo de arnés que reuniría  los requisitos necesarios.

Ponis de Manchuria utilizados por la expedición de Scott.
Ponis utilizados por la expedición británica

¿Es el arnés de perros de Alaska mejor que el de Groenlandia?

Inicialmente, la expedición noruega adquirió un centenar de arneses, similares a los que usan los esquimales de Alaska, descartando el arnés de uso en Groenlandia.

En el arnés de Alaska, los esquimales llevan sus perros en tándem, de esta forma el tiro siempre va en línea recta, en la dirección de marcha del trineo, que es la mejor forma de aprovechar toda la fuerza de los perros. Amundsen, se decantó por este sistema, atendiendo a las siguientes necesidades:

  • Durante el viaje por la barrera de Ross, al pasar por la grietas, con el arnés de Alaska,  los perros pasarían de uno en uno por las fisuras, con lo que se reduciría considerablemente el problema de caer en ellas.
  • El punto de aplicación de la fuerza sobre los perros también es menos molesta con los arneses de Alaska que con los de Groenlandia: el arnés de Alaska tiene un collar muy plano y acolchado que se desliza sobre la cabeza del animal y hace que el peso descanse sobre sus hombros, mientras que los otros presionan sobre su pecho. El problema de las rozaduras que aparecen con el arnés de Groenlandia se evita en gran parte con el de Alaska. 

Posteriormente ya en la Barrera de Ross, se comprobó que la utilización del arnés de Alaska pensado inicialmente, no fue satisfactoria. Se utilizó también el de tipo Groenlandia, pero finalmente se acabó por confeccionar un arnés tipo mixto Alaska-Groenlandia, cuyo resultado satisfacía todas las exigencias requeridas. Esta innovación, fue la finalmente empleada, viendo que era superior a cualquiera de los otros modelos.

Material de Campamento

Cabañas prefabricadas británicas

El principal material de campamento fueron, las cabañas utilizadas por ambas expediciones para establecer sus respectivos cuarteles de invierno. Se tiende a confundir los refugios utilizados en la Antártida por los británicos.

Scott durante la expedición Discovery en 1902, en la península de Hut Point, construyó su primer refugio. Este refugio fue utilizado también durante la expedición Terra Nova, especialmente como punto de partida y refugio para los trayectos a hacia la barrera de hielo de Ross.

Un refugio invadido por el hielo, no ayuda

Los británicos contaban con la ventaja de tener ya reconocida la zona, así como poder utilizar el refugio de Hut Point. Cuando llegaron a dicha cabaña, Scott se llevó un chasco puesto que estaba llena de nieve y hielo. La nieve acumulada se había congelado y el interior de la cabaña era como un gran bloque de hielo.

“Que deprimente ha sido encontrar la vieja cabaña en tan pésimo estado. Con el interés que tenía yo en ver la cabaña y todos los accidentes del terreno con el mismo aspecto…Acampar fuera con la sensación de que toda la comodidad y animación de antaño ha desaparecido ha sido verdaderamente desgarrador”.

Capitán Scott

Un refugio estandarizado

Cuando el Terra Nova alcanzó el cabo Evans, el equipo de la misión desembarco los 17 ponis, 32 perros y los tres vehículos motorizados (perdiendo uno durante la descarga). Construyeron una cabaña prefabricada de madera, de características similares a la de Hut Point. Esta nueva cabaña, tenía unas dimensiones de 15 metros de largo y 7,7 metros de ancho y 2.75 de altura. El aislante empleado era de algas y estaba sujeto formando un acolchado.

Refugio británico de madera en Cape Evans que usaba algas como aislante térmico. Fue un éxito de la logística y selección de los materiales de campamento polar
Imagen del refugio de Cape Evans, muestra del material de campamento polar británico

“Los costados están provistos de tablas dobles (machihembradas) por dentro y por fuera del armazón, con una capa de nuestro excelente aislante de algas entre las tablas. Si el techo tiene por dentro un entarimado de tablas machihembradas, por fuera tiene otro igual y además de una capa doble de fieltro alquitranado y una capa de algas, más un segundo entarimado y una triple cubierta de fieltro alquitranado”.

Capitán Scott

El suelo constaba de una tarima de madera pegada al armazón una capa de algas, una capa de fieltro sobre la cual iba una segunda tarima y finalmente un recubrimiento de linóleo. Este refugio sigue existiendo en la actualidad.

La cabaña antártica Noruega

La expedición noruega, no contaba con la misma información que la británica. Los noruegos, se adentrarían en un territorio totalmente desconocido. Amundsen consciente de este punto, tuvo claro desde el principio, que dicha cabaña debía poderse montar de la manera más fácilmente posible y sobre todo debía poder ensamblarse, con las herramientas y equipos que tendrían en la Antártida.

Para ello, una vez encargado el diseño, se cercioró de ensamblarla en su casa, en Bundefjord, de forma que pudo observar todo el proceso de montaje. La cabaña, medía 8 metros de largo por 4 de ancho y una altura de 3,5 metros. Estaba construida a modo de las casas noruegas, con techo a dos aguas y dos habitaciones, una de ellas de 6 metros de largo, la cual se utilizaba como dormitorio, comedor y sala de estar y la otra medía 2 metros de largo y era la cocina.

Aislamiento y distribución del refugio antartico

Desde la cocina a través de una doble trampilla, se accedía a la parte superior que era utilizada como almacén de provisiones y equipos. Las paredes estaban formadas por tablas de casi ocho centímetros, con cámara de aire entre ellas, con paños por dentro y por fuera, formando también cámara de aire entre ellos y las maderas de la pared. Como aislamiento se empleó pulpa de celulosa.

Tanto el suelo como el techo de la planta baja eran dobles, mientras que la parte más alta del tejado era simple. Las puertas eran extraordinariamente gruesas y fuertes, con los bordes oblicuos para que encajasen perfectamente en el marco, proporcionando un cierre hermético. Tenía dos ventanas (una triple, al final de la pared de la sala principal, y otra doble en la cocina).

En la habitación principal había dos respiraderos, uno que permitía la entrada de aire renovado y otro que dejaba salir el viciado. Había literas de dos camas para diez hombres. Se utilizaron seis cables de acero tensados para anclar la cabaña al hielo.

Ambas expediciones, llevaron suficiente cantidad de madera de construcción, tablones y planchas, para poder hacer las oportunas reparaciones o modificaciones.

Tiendas de campaña

Ambas expediciones transportaron tiendas en diferente número, para sus respectivas misiones. Destacar de nuevo, que la expedición noruega, estudio el tipo de tienda que se adaptara mejor en la Antártida en base a su calidad de materiales y sobre todo de fácil montaje.

Amundsen dispuso de quince tiendas para dieciséis hombres cada una (se utilizaron como almacenes) y seis tiendas para tres personas. Estas últimas, tenían la característica de estar hechas con unas lonas tupidas y con el suelo de una sola pieza. Las podía montar un hombre solo aun con fuerte brisa y tenían un solo mástil. La expedición noruega llegó a la conclusión que cuantos menos mástiles mejor. Así pues, estas últimas eran de un solo mástil. La puerta de entrada de estas tiendas, tenían forma de saco. El funcionamiento era bastante simple, practicaron una abertura en la tienda del tamaño deseado, al que cosieron fuertemente un saco abierto por los dos extremos, alrededor de la abertura realizada en la tienda, quedando un acceso a modo de embudo. Al entrar, hacían un nudo en el lado exterior del saco y de esta forma no entraba nada del exterior.

Se ve a la expedición de Amundsen junto a un tienda de un solo techo y mástil. Resultado del estudio del material de campamento polar existente
Tienda noruega de un sólo mástil elegida tras el estudio del material de campamento polar existente

¿Tiendas de doble techo?

Otra cuestión importante que fue estudiada por parte de la expedición noruega, fue el empleo de doble techo o techo simple. Una tienda de doble techo es más cálida que una simple, pero, al mismo tiempo, el mayor inconveniente es también el doble de pesada.

Amundsen y sus hombres decidieron llevar a cabo distintas experiencias para determinar, si en ambos modelos, la formación de escarcha era similar y de esa manera poder cuantificar el peso de ambas tiendas.

“Llegamos a la conclusión de que los depósitos de escarcha se producen tan rápido en una doble como en una simple, de manera que la utilidad de una tienda doble me pareció más bien incierta”. 

Roald Amundsen

Finalmente decidieron sacrificar el confort de disponer unos cuantos grados más dentro de la tienda y reducir peso a transportar.

“Además, teníamos tal cantidad de ropa para dormir calientes que no tendríamos que sufrir mayores penurias”. 

Otro detalle de suma importancia, era decidir el color más idóneo para las tiendas. La expedición noruega, se decantó por utilizar tonos oscuros por varias razones. En primer lugar, como descanso para la vista, puesto que eran conocedores de que una tienda oscura era más confortable, sobre todo después de viajar todo un día por la brillante superficie de la barrera. En segundo lugar, el color oscuro puede captar una gran cantidad de calor al salir el sol. Y en último lugar, una tienda oscura sería mucho más fácil de ver sobre una superficie blanca que una de color claro. Por todos estos motivos, los noruegos decidieron teñir todas sus tiendas que en un primer momento eran de colores claros.